Los textos de referencia

¿Es necesario ponerse de acuerdo al nivel internacional sobre un texto común que define las responsabilidades? ¿Y es posible, con la gran diversidad de las culturas del mundo? ¿Existe ya este tipo de texto? ¿Si se llega a un texto común, a quién y para qué servirá?

Estas son las cuatro preguntas que nos planteamos desde el principio de nuestro trabajo en 1994. Nos interesa saber lo que piensan ustedes de ellas. Aquí tienen nuestras propias respuestas:

  • La comunidad internacional se ha basado en dos pilares: la Carta de la ONU y la Declaración Universal de Derechos Humanos. Fueron la base de las evoluciones posteriores. Mas falta un tercer pilar para fundar la ética y el derecho nacional e internacional en el siglo XXI, y este pilar es el de la responsabilidad, que traduce la interdependencia entre las sociedades y entre la humanidad y la biosfera.
  • La idea de responsabilidad mutua está en el centro de toda comunidad, aunque la manera de expresarla varía en función de cada civilización. Por esto la responsabilidad es un valor ético universal. Si se quiere construir una comunidad mundial de destino, ello implica la afirmación de las responsabilidades mutuas y del respecto a la biosfera.
  • Se han propuesto muchos textos como tercer pilar, en particular distintas versiones de Cartas de la Tierra con motivo de la Cumbre de la Tierra de Rio en 1992. Los hemos examinado todos y encontrarán los resultados de este examen en ¿Por qué una Carta de las Responsabilidades Universales? Fue este examen crítico que nos condujo:
  • La Asamblea General de la ONU no va a adoptar mañana la Declaración, ya que obliga a reconocer que más se tiene poder, más se tiene responsabilidades, y que la soberanía de los estados no les exime asumir la responsabilidad de sus actos y de los de sus dirigentes. Pero volviéndose en referencia para la sociedad:
    • la Declaración tiene un impacto, incluso para hacer evolucionar el derecho; algunos tribunales ya se basan en estas ideas para cuestionar la responsabilidad de los gobernantes y de las empresas multinacionales;
    • las Cartas éticas elaboradas por distintos medios se inspiran directamente en la Declaración;
    • se puede esperar que los principios de la Declaración se integrarán progresivamente en las constituciones de distintos países;
    • se pueden alegar los principios generales de la Carta para elaborar acuerdos internacionales sobre los bienes comunes de la humanidad, el clima, los océanos, etc., y para juzgar de su aplicación por los gobernantes.